CUIDADOS PARA EL CABALLO DE PASEO

Muchos de nuestros caballos de monta,  los dedicamos de forma habitual para paseo y rutas campestres durante todo el año para disfrutar de ellos y de la naturaleza.

En estos paseos se nos producen numerosas incidencias, caminos pedregosos, matorrales, insectos, moscas, mosquitos. Los caballos sudan. Si los recorridos son largos debemos prever suministros de agua.

Algunos consejos nos ayudarán a disfrutar de un paseo y mantendrán a nuestro caballo en forma.

Alimentación: en todos los caballos de paseo o cualquier otra función, es el principal soporte para que nuestros animales estén fuertes y sanos. Algunos realizan largos recorridos, incluso varios días y los sometemos a un desgaste que debemos compensar con una correcta alimentación. El nivel de energía debe adaptarse a esas situaciones y no es lo mismo un mantenimiento para ocio y paseo que para una travesía por rutas de montaña.

Agua corriente limpia y abundante a libre disposición. Forraje de calidad, preferiblemente heno, son claves. Es también importante la ración de concentrado, aunque en ocasiones no es suficiente aporte de energía para tanto ejercicio. Se deben añadir, a la ración de mantenimiento, suplementos a base de grasa de alta calidad, que aportan la energía extra necesaria para una condición corporal adecuada y evitar un consumo excesivo de pienso.

Estos suplementos sirven para el  cuidado de las articulaciones, mejoran el pelo y los cascos, y previenen problemas dermatológicos.

Con el sudor pierden agua y sales minerales. Estas sales serán repuestas con el alimento en el periodo de descanso, pero con mayor trabajo debemos aportar estos suplementos para conseguir una recuperación más rápida.

Los cascos son otro punto muy importante en el cuidado del caballo. Su limpieza diaria, la utilización de pomadas de cascos de buena calidad, el herraje cada 45-60 días ayudan a mantenerlos fuertes, flexibles y reducirán en gran medida la aparición de cojeras.

La primavera está a la vuelta de la esquina y los paseos  y disfrute del caballo se hará con más frecuencia y  se convierte en una necesidad el empleo de repelentes de insectos. Evitaremos molestias al  caballo y jinete y se previenen problemas de piel por la picadura de moscas, mosquitos y se mantienen alejadas garrapatas que son responsables de graves enfermedades. El empleo de este tipo de productos se debe mantener de continuo hasta finales de verano y otoño ya que aumentan los brotes de enfermedades transmitidas por mosquitos.

Otros cuidados necesarios ayudan a mantener al caballo sano y en forma.

Cepillado diario para una buena salud del pelo y de la piel. Evitar rozaduras por la montura. La realización de estas tareas permite identificar rápidamente problemas dermatológicos. Limpieza y cuidado frecuente del sudadero, cabezada y embocadura evita molestias al caballo y evitan otros problemas.

El uso de protectores en las extremidades de los caballos de paseo, los protegen de traumatismos y heridas provocadas por piedras, ramas, etc.

Finalmente, todas estos consejos,  un programa de vacunación y desparasitación adecuados, y el cuidado de la boca, son fundamentales para el óptimo rendimiento del caballo y que podáis disfrutar plenamente de él.

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